Es la torcedura o distensión violenta de una articulación que puede ir acompañada de la ruptura de un ligamento o de las fibras musculares. El origen del esguince puede ser por un movimiento brusco o traumatismo.
Es muy frecuente particularmente en los deportistas y en general en personas jóvenes y adultos.

La localización más común de los esguinces corresponde a las articulaciones que soportan mayor parte del peso corporal, es decir, los tobillos, las rodillas y la columna vertebral. Sin embargo pueden localizarse en cualquier parte del cuerpo.

El principal síntoma del esguince es el dolor que aparece de inmediato, generalmente es intenso e impide movilizar la articulación afectada.